¿Cuántas veces has sentido que la contaminación y el calentamiento global son temas que te exceden?. Es habitual pensar que el cuidado del planeta es responsabilidad de otros, de las grandes empresas o del Estado. Lo cual es cierto, pero también debemos aceptar que es responsabilidad de cada uno hacer su pequeño aporte por el ecosistema.
Con pequeños cambios de hábitos puedes generar un gran cambio. No hace falta hacer una transformación total de tu estilo de vida para ser una persona más sostenible.
Así como el simple hecho de separar los residuos que no demanda más de 5 segundos es una gran ayuda para el medio ambiente, cambios en los hábitos tecnológicos también son fáciles de implementar y de gran ayuda para el planeta.
Hoy vamos a compartirte 3 tips con los que puedes llevar una vida más sostenible al cambiar tus hábitos tecnológicos.
¡Vamos a ello!
Buscar el sello ISSOP
No todos los consumidores conocen el significado del sello ISSOP. Sus siglas provienen de Innovación Sostenible Sin Obsolescencia Programada y es una denominación española creada por la Fundación Energía.
Su objetivo es hacer frente a la obsolescencia programada, es decir, que los productos tengan una vida útil razonable y no pierdan su efectividad rápidamente. ISSOP es un sello que distingue a aquellos dispositivos electrónicos cuya vida útil no se ve reducida por intereses comerciales.
Cuesta creerlo, pero muchas empresas fabrican los productos con el objetivo de que pasado cierto tiempo comience a fallar la batería, el almacenamiento u otras funcionalidades. El objetivo está claro: aumentar las ventas y la frecuencia de compra por parte de los consumidores.
Cuando compras un móvil u otro dispositivo electrónico puedes averiguar si cuenta con el sello ISSOP. Así, sabrás si adquieres un producto amigable con el medio ambiente que no quede obsoleto antes de tiempo.
¡Es un pequeño hábito que puedes adquirir antes de comprar un móvil y que sin dudas ayuda a no derrochar en aparatos electrónicos!
No usar el móvil mientras se carga
Nuestra dependencia hacia el móvil hace que no podamos evitar usarlo mientras se carga. No importa cuanto tiempo falte para que la batería esté llena, necesitamos usar el smartphone en ese mismo instante. ¡Es una adicción!
El problema de usar el móvil mientras está cargando es que ralentizará el proceso. Lo que podía demorar una hora se extiende a una hora y media.
Además, es prejudicial para el funcionamiento del teléfono estar al mismo tiempo procesando la carga de la batería y el uso de la misma.
Es mejor controlar la ansiedad por ver las notificaciones y permitir que el móvil se cargue por completo. Así, extiendes la vida útil del móvil y ayudas el medio ambiente reduciendo el tiempo de carga.
Apostar por reacondicionados
Por supuesto, no podemos dejar de mencionar las ventajas de los móviles reacondicionados en el ecosistema.
Considerando que un teléfono tiene más de una vida útil, reutilizar uno que estaba por ser descartado es uno de los hábitos más sostenibles que puedes implementar.
Creemos que ante el menor fallo un móvil deja de ser funcional para los usuarios. Pero, al ser reparado por expertos, vuelve a funcionar como si estuviese nuevo. Es falso que un smartphone tiene una única vida útil, los teléfonos de hoy en día se pueden utilizar hasta 2 y 3 veces más.
Si quieres reducir los 55kg de CO₂ que genera la fabricación de un móvil, nada mejor que comprar uno reacondicionado. Adquirirás un teléfono de alta gama, a un mejor precio y reduciendo la huella de carbono.
Con estos pequeños cambios en tus hábitos tecnológicos generarás un gran aporte en el planeta.